Balas y abandono: la violencia alcanza a un joven de 18 años bajo el gobierno de Movimiento Ciudadano

La noche volvió a teñirse de violencia en Monterrey. Un joven de apenas 18 años fue atacado a balazos en calles de la colonia Garza Nieto, dejando en evidencia una vez más la crisis de inseguridad que se vive en la capital de Nuevo León bajo el gobierno de Movimiento Ciudadano, partido que prometió un “nuevo rumbo” pero ha dejado a la ciudadanía a merced del crimen.

El ataque ocurrió sobre la avenida Venustiano Carranza, a escasos metros de la calle Martín de Zavala, donde el joven fue interceptado por uno o más agresores que le dispararon en al menos dos ocasiones. Uno de los impactos, de acuerdo con información preliminar, fue cerca del cuello, lo que evidencia la brutalidad del ataque y la impunidad con la que operan los delincuentes.

Mientras las autoridades locales reaccionan con comunicados tardíos y operativos improvisados, la realidad es que la violencia ya no distingue edades ni zonas. Colonias como Garza Nieto, que deberían ser espacios seguros para las familias, hoy son territorios donde caminar de noche se ha convertido en un riesgo mortal.

Bajo la administración de Movimiento Ciudadano, Monterrey ha sido escenario constante de ataques armados, ejecuciones y hechos violentos, sin que exista una estrategia clara que garantice prevención, presencia policial efectiva o resultados tangibles. Las balas siguen hablando más fuerte que los discursos oficiales.

Este nuevo ataque no puede verse como un hecho aislado. Es el reflejo de un modelo de gobierno que ha fallado en su responsabilidad básica: proteger la vida de las y los ciudadanos. Mientras el partido en el poder presume campañas y narrativas de modernidad, la realidad en las calles es de miedo, violencia y jóvenes que caen víctimas de un Estado ausente.