“Con el agua hasta el cuello y sin gobierno: Morena abandona a Campeche ante el embate de las tormentas”

8/4/20251 min read

CAMPECHE, Camp.— La naturaleza golpea con fuerza y el gobierno brilla por su ausencia. Las recientes ondas tropicales han provocado lluvias intensas, tormentas eléctricas, vientos violentos y hasta granizadas en distintos puntos de Campeche, dejando calles inundadas, viviendas afectadas y familias atrapadas… pero sin rastro de un plan de acción estatal digno. Layda Sansores y su administración parecen más preocupados por la narrativa política que por proteger a su gente.

Los daños se multiplican en colonias populares donde las autoridades no han hecho nada por mejorar el drenaje o prevenir contingencias. En muchos sectores, el agua alcanzó niveles alarmantes, sin que Protección Civil o las dependencias estatales respondieran con prontitud. Mientras tanto, la gobernadora se limita a emitir comunicados tibios en redes sociales, completamente desconectados de la realidad que viven los campechanos.

A esta crisis se suma la falta de infraestructura básica para afrontar fenómenos meteorológicos que son cada vez más frecuentes. En lugar de invertir en sistemas de prevención, albergues o protocolos comunitarios, el gobierno de Morena ha preferido despilfarrar el presupuesto en obras de relumbrón y “eventos de imagen”, dejando a Campeche indefenso frente a la fuerza de la naturaleza.

La sensación térmica sofocante, combinada con la humedad extrema y el temor a nuevos deslaves o inundaciones, ha encendido las alertas entre los ciudadanos. Sin embargo, lo más grave no es el clima, sino el abandono institucional. No hay coordinación, no hay respuestas claras y no hay liderazgo. El estado se inunda, mientras el gobierno se esconde.

Campeche hoy es una entidad vulnerable no solo por razones naturales, sino por la negligencia y la indiferencia de sus autoridades. Las tormentas son inevitables, pero el abandono es imperdonable. Morena y Layda Sansores prometieron transformación, pero solo han entregado caos, simulación y un estado literalmente hundido.