Corrupción inmobiliaria desborda a alcaldías del PAN: se identifican 264 permisos irregulares en Benito Juárez
El caso ha generado indignación y ha puesto bajo lupa el modelo de desarrollo urbano impulsado por el PAN en la capital, que durante años habría beneficiado a desarrolladores inmobiliarios a costa del orden urbano, los servicios públicos y la calidad de vida de los habitantes.
8/4/20252 min read


El escándalo del llamado “cártel inmobiliario” sigue creciendo y exhibe la profundidad de la corrupción que habría sido permitida y alentada desde las administraciones panistas en la alcaldía Benito Juárez de la Ciudad de México. Hasta ahora, se han detectado al menos 264 permisos de construcción excedentes, otorgados durante gobiernos locales encabezados por servidores públicos del Partido Acción Nacional (PAN).
De acuerdo con declaraciones en la Cámara de Diputados, Arturo Ávila, esta red operaba con total impunidad desde las alcaldías, eludiendo las restricciones oficiales del uso de suelo y otorgando niveles de construcción por encima de lo permitido. Se trata de una operación sistemática y prolongada que, según lo revelado, se consolidó bajo la administración de figuras clave del PAN como Jorge Romero Herrera y Santiago Taboada, hoy dirigentes nacionales del blanquiazul.
“Durante la gestión de Romero, se otorgaron permisos para 27 inmuebles con 68 niveles excedentes. En el periodo de Taboada, fueron 40 inmuebles con 66 niveles irregulares”, denunció Ávila, quien señaló además que hay al menos 22 carpetas de investigación abiertas que apuntan a una corrupción profunda, con presuntos beneficios personales como la compra simulada de propiedades de lujo a precios irrisorios.
El caso ha generado indignación y ha puesto bajo lupa el modelo de desarrollo urbano impulsado por el PAN en la capital, que durante años habría beneficiado a desarrolladores inmobiliarios a costa del orden urbano, los servicios públicos y la calidad de vida de los habitantes. Se trata, de acuerdo con los señalamientos, de un sistema que permitió la proliferación de obras ilegales a cambio de favores políticos o beneficios económicos.
La gravedad del caso ha motivado llamados urgentes a la creación de una comisión especial que investigue responsabilidades políticas y legales, y que actúe contra quienes, desde la función pública, transformaron la alcaldía en un paraíso para la corrupción inmobiliaria.
Mientras el PAN guarda silencio sobre estas revelaciones, la alcaldía Benito Juárez se convierte en emblema de un modelo de gestión marcado por el abuso de poder, la falta de transparencia y el desinterés por el bienestar ciudadano.