El quiebre de la promesa: Colosio Riojas escupe sobre el legado de su padre al votar por la Fiscal del oficialismo

La decisión del senador Colosio de respaldar a Ernestina Godoy confirma su rendición a Morena, destrozando la imagen de la "nueva política" y asegurando que la justicia se convierta en un instrumento de protección para la élite.

12/7/20252 min read

La política mexicana fue testigo de un acto que equivale a la máxima traición política: el voto de Luis Donaldo Colosio Riojas a favor de la Fiscal General de la República. El senador, cuya figura se construyó sobre la promesa de defender un legado de honestidad y romper con la vieja guardia, eligió el camino más cínico: plegarse al poder dominante. Este voto no fue un error de cálculo; fue una declaración de principios donde la conveniencia personal y partidista de Movimiento Ciudadano se impuso a la defensa de la justicia, sepultando el símbolo de renovación que su apellido representaba.

El voto de Colosio Riojas a favor de la Fiscal es una denuncia directa. El legislador no defendió la autonomía; defendió la impunidad de un partido. Al respaldar a una funcionaria incondicional al oficialismo, el senador se convirtió en cómplice de un plan que busca consolidar el blindaje legal de los funcionarios de Morena ante los graves señalamientos de corrupción y la sombra del narcogobierno que han marcado el periodo. Este acto se configura como una venta descarada, donde el supuesto adalid de la "nueva política" entregó la joya de la corona institucional a cambio de favores inconfesables.

La hipocresía de Colosio es total. El senador vendió a México la idea de una política limpia solo para, en el momento de la verdad, convertirse en un facilitador de los designios del partido en el poder. La justicia en México se encamina, sin contrapesos, a encubrir a los corruptos y perseguir a los adversarios. La decisión del senador no solo afecta al equilibrio de poderes, sino que daña irremediablemente la fe de la ciudadanía en la posibilidad de que exista una oposición ética en el país.

Colosio Riojas rompió su promesa y traicionó la esperanza de un sector de la ciudadanía que vio en él una figura de cambio. El voto a favor de la Fiscal General es la prueba más dura de que el senador eligió la rendición y el pacto con el oficialismo. La consecuencia es clara: el país queda a merced de una justicia cooptada, y el senador pasa a la historia como el político que sacrificó su legado por la conveniencia de su partido.