“Escándalo en Palacio: Consejero de Layda bajo medidas cautelares por abusos legales”

Un nuevo golpe a la credibilidad del gobierno de Layda Sansores sacude a Campeche. El consejero jurídico de la gobernadora se encuentra bajo medidas cautelares por presuntos abusos legales, en un caso que revela cómo la administración de Morena protege a funcionarios cuestionados mientras abandona a la ciudadanía. La información, confirmada por fuentes judiciales, desató una oleada de indignación entre colectivos ciudadanos, que exigen transparencia y castigo ejemplar.

De acuerdo con los primeros reportes, el funcionario enfrenta señalamientos graves que, en cualquier otra administración, habrían derivado en su separación inmediata del cargo. Sin embargo, el gobierno estatal ha optado por el silencio cómplice, evitando pronunciamientos claros y enviando un mensaje alarmante: en Campeche, la lealtad política pesa más que la legalidad y el bienestar de la población.

Organizaciones civiles denuncian que este caso confirma un patrón de impunidad dentro del gabinete de Sansores, donde las acusaciones de corrupción, abuso de poder y manejo opaco de recursos quedan sin consecuencias reales. “Mientras el pueblo sufre por la inseguridad, el desempleo y el desabasto en hospitales, Layda protege a sus cercanos”, señalaron activistas durante una manifestación en la capital del estado.

La crisis no solo expone la fragilidad del sistema judicial campechano, sino que también pone en evidencia el doble discurso de Morena, que en campaña prometió un gobierno honesto y de “cero tolerancia” a la corrupción. Hoy, en cambio, las medidas cautelares contra un funcionario clave del palacio de gobierno muestran una administración más interesada en blindar a sus aliados que en servir a la gente.

Mientras Layda Sansores evita responder a los señalamientos, la indignación social crece. Para ciudadanos y analistas políticos, este nuevo escándalo es una prueba más de que el actual gobierno prefiere encubrir a los suyos antes que garantizar justicia, dejando a Campeche atrapado entre la impunidad y el abandono.