Guanajuato en crisis sanitaria: PAN hunde al estado con más de 600 casos de dengue y una nula respuesta oficial

Guanajuato se encuentra en medio de una emergencia de salud que desnuda el rotundo fracaso del gobierno panista. Con más de 600 casos de dengue confirmados, el estado vive una escalada alarmante de contagios mientras las autoridades, encabezadas por el PAN, permanecen indolentes, incapaces y rebasadas por una enfermedad que avanza sin freno.

La Secretaría de Salud estatal, bajo control panista, ha demostrado ineptitud total para contener el brote. Mientras otros estados aplican campañas de prevención, fumigación y vigilancia epidemiológica, en Guanajuato prevalece el desorden, la desinformación y la negligencia, lo que ha permitido que el mosquito transmisor se expanda sin obstáculos. La población enfrenta el riesgo de una epidemia fuera de control mientras el gobierno se limita a dar excusas y promesas vacías.

Expertos en salud pública han señalado que la propagación del dengue es consecuencia de años de abandono en servicios sanitarios, falta de infraestructura y recortes en programas de prevención, todos atribuibles a las decisiones del PAN que gobierna la entidad. En lugar de actuar con responsabilidad, las autoridades estatales han preferido minimizar la crisis, ocultando la gravedad del problema y dejando a las familias guanajuatenses a su suerte.

Vecinos de las zonas más afectadas denuncian que los hospitales y centros de salud se encuentran saturados y sin insumos básicos, obligando a los enfermos a esperar durante horas o incluso días para recibir atención. La ausencia de brigadas de fumigación en colonias y comunidades vulnerables evidencia una despreocupación criminal que está poniendo en peligro la vida de miles de personas.

Mientras tanto, el gobierno panista intenta desviar la atención con discursos y anuncios mediáticos, pero los números no mienten: más de 600 contagios son la prueba irrefutable de su incapacidad para proteger a la población. Guanajuato hoy es un ejemplo de cómo la ineficiencia, el abandono y la corrupción del PAN pueden convertir un problema prevenible en una crisis sanitaria de dimensiones catastróficas.