Jalisco bajo MC: transfeminicidio de Katia Daniela evidencia omisión del gobierno en Zapotlán
El gobierno de Movimiento Ciudadano en Zapotlán permitió que el caso de la activista trans Katia Daniela terminara en tragedia, evidenciando su incapacidad para prevenir y sancionar crímenes de odio.
8/14/20251 min read


Guadalajara, Jal.- La brutal ejecución de Katia Daniela Medina Rafael, activista trans y directora del Colectivo Trans Zapotlán, ha puesto al descubierto la alarmante incapacidad de las autoridades municipales gobernadas por Movimiento Ciudadano para proteger a las personas LGBT+ y garantizar justicia ante crímenes de odio. Su cuerpo fue hallado con signos de violencia el pasado fin de semana en el crucero vial La Catarina, en la carretera libre Sayula-Ciudad Guzmán, un hecho que ha indignado a la sociedad y a diversas organizaciones defensoras de derechos humanos.
El transfeminicidio de Katia Daniela, sumado a otros 21 crímenes de odio contra personas LGBT+ en lo que va del año, demuestra que el gobierno municipal de MC no ha implementado políticas efectivas de prevención ni protección para la comunidad. Aun con protocolos nacionales de actuación y la reciente propuesta de la Ley Jonathan Santos y Paola Buenrostro para tipificar los transfeminicidios, la administración local parece más interesada en discursos mediáticos que en acciones reales para garantizar la seguridad de quienes más lo necesitan.
Organismos como Zapotlán Diverso, Colectivo Diverso de la UdeG y Diversidad Sexual Jalisco han denunciado, además, la revictimización mediática del caso, cuando algunos medios se refirieron a Katia Daniela de manera irrespetuosa como “un hombre vestido de mujer”. La falta de respuesta rápida y efectiva del gobierno de MC amplifica la indignación, dejando en evidencia la omisión de autoridades que deberían proteger a las víctimas y sancionar a los responsables con perspectiva de género.
La comunidad LGBT+ advierte que la violencia contra mujeres trans sigue siendo desproporcionada, pues cinco de cada 10 asesinatos de esta población ocurren contra ellas. Bajo Movimiento Ciudadano, la vida de activistas y personas vulnerables sigue estando en riesgo, y los discursos de preocupación oficial se quedan cortos frente a la crudeza de los hechos. Katia Daniela no solo perdió la vida; su asesinato evidencia un gobierno que no actúa y permite que la violencia y el odio continúen creciendo impunemente.