Morena y PT rompen su alianza: crece la tensión interna en la 4T y se tambalea la coalición en Durango

La relación entre Morena y el Partido del Trabajo (PT) vive su momento más crítico desde el arranque de la Cuarta Transformación. Esta semana, Reginaldo Sandoval, coordinador de la bancada del PT en la Cámara de Diputados, advirtió que la relación con Morena está “congelada por su soberbia”, reflejo de los crecientes conflictos internos.

La ruptura se intensificó luego de que Morena decidiera excluir al PT de la alianza electoral en Veracruz, optando por competir solo con el Partido Verde Ecologista. Para el PT, esta decisión fue interpretada como un acto de desprecio. "Cuando no hay oposición fuerte enfrente, empiezan a ver competencia a la izquierda", reprochó Sandoval ante medios de comunicación.

El impacto de esta fractura no se limita a Veracruz. En Durango, donde el PT también ha sido un aliado fundamental en elecciones recientes, la alianza corre riesgo. Dirigentes locales han comenzado a manifestar inconformidades, advirtiendo que, si no se replantean los acuerdos, podrían romper definitivamente con Morena antes del 1 de junio.

La tensión crece en momentos clave: en el Congreso federal, los 49 diputados y seis senadores del PT son esenciales para que Morena conserve la mayoría calificada que permite aprobar reformas constitucionales. Sin el respaldo petista, varias de las principales iniciativas impulsadas por el Ejecutivo podrían quedar congeladas.

La ruptura en Veracruz y el riesgo de una separación en Durango evidencian que los conflictos internos dentro de la 4T podrían tener un impacto profundo tanto en el plano legislativo como en los resultados electorales de este año.