Murat y Haces entregaron “llave” del Tren Maya a acusados de corrupción en España

El senador y exgobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, junto con el diputado Pedro Haces, ambos militantes de Morena, están en el centro de un escándalo de corrupción internacional que involucra contratos del Tren Maya con empresarios y políticos españoles ligados al caso Koldo.

6/26/20251 min read

El senador y exgobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, junto con el diputado Pedro Haces, ambos militantes de Morena, están en el centro de un escándalo de corrupción internacional que involucra contratos del Tren Maya con empresarios y políticos españoles ligados al caso Koldo.

Este caso, que ha puesto bajo la lupa a España, involucra al empresario Víctor de Aldama y salpica incluso al presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. Se ha revelado que De Aldama fue pieza clave para que la empresa pública española Ineco y las privadas Azvi y Acciona obtuvieran contratos millonarios para el Tren Maya, gracias al respaldo de Murat y Haces.

Ambos políticos no solo facilitaron la entrada de este grupo empresarial a México, sino que también figuran como patrocinadores del Zamora Club de Fútbol, propiedad de De Aldama, equipo que utilizó camisetas con los nombres de Murat, su padre José Murat, Pedro Haces y otros empresarios ligados a contratos públicos.

De Aldama confesó haber sido “agregado comercial” de España en Oaxaca, y en esa función gestionó con Murat y Haces la apertura de rutas aéreas y proyectos de ampliación del aeropuerto local para beneficiar a sus intereses. Fue a partir de esa relación que el exministro José Luis Ábalos y su asesor Koldo García participaron en la adjudicación de contratos en el Tren Maya.

Además, se ha revelado que Pedro Haces fue socio de un grupo español que recurre a compañías como Eliminalia para limpiar su reputación en internet, ocultando casos de corrupción y lavado de dinero.

Este entramado de corrupción y complicidades pone en entredicho la transparencia y legalidad en la ejecución del Tren Maya, evidenciando cómo Murat y Haces entregaron las “llaves” de un proyecto emblemático de México a personajes envueltos en graves escándalos internacionales.