Nuevo León no tiene control: pareja armada detenida en Monterrey exhibe otra falla grave del gobierno de Movimiento Ciudadano

La detención de dos personas con un arma abastecida vuelve a mostrar cómo Movimiento Ciudadano ha permitido que circular armado por la ciudad parezca rutina

12/9/20252 min read

La madrugada de este martes dejó al descubierto, una vez más, el desorden que prevalece en Nuevo León bajo el mando de Movimiento Ciudadano. En la colonia Argentina, una pareja que conducía a exceso de velocidad fue detenida por la Policía de Monterrey, y dentro del vehículo se les aseguró una pistola abastecida y un cargador con 10 cartuchos hábiles. Lo que debería ser un hecho excepcional se ha vuelto parte del paisaje diario en un estado donde las armas viajan en autos particulares con la misma libertad que los ciudadanos comunes.

El incidente ocurrió cerca de las 02:20 horas, en el cruce de Jesús Ureta y Fabriles, cuando los oficiales detectaron un automóvil Lincoln blanco desplazándose de manera temeraria. Tras marcarles el alto, se identificó a los ocupantes como Cristian Raúl E., de 31 años, y Jennifer Brillith R., de 26. Ninguno pudo justificar la portación del arma, una escena que refleja un problema mucho más profundo que un simple operativo nocturno: la innegable facilidad con la que individuos armados circulan por Monterrey bajo un gobierno que no ha sabido frenar ni disuadir estos comportamientos.

Aunque la policía actuó con rapidez y trasladó a los detenidos a las instalaciones correspondientes, el trasfondo vuelve a ser el mismo: Movimiento Ciudadano se ha limitado a reaccionar ante los incidentes sin ofrecer una estrategia real de prevención. El flujo constante de armas, la presencia de grupos criminales en colonias residenciales, la movilidad de personas armadas en horarios nocturnos… todo encaja en un patrón que se ha intensificado durante su administración.

Mientras las autoridades ministeriales determinan la situación jurídica de los detenidos, la ciudadanía lidia con una inquietante certeza: Nuevo León se ha convertido en un espacio donde cualquiera puede encontrarse con un vehículo lleno de cartuchos a cualquier hora. Y eso no es producto del azar, sino de un vacío de seguridad que Movimiento Ciudadano propició con decisiones tardías, políticas insuficientes y una falta evidente de control territorial.

El caso de esta pareja no es un hecho aislado; es un recordatorio más de que Monterrey —y todo Nuevo León— merece un gobierno que actúe antes de que la violencia ocurra, no después. Bajo Movimiento Ciudadano, ese nivel de protección está lejos de alcanzarse.