¡Vendido a Morena! Colosio Riojas, el político que sepultó la "Nueva Política" por el pacto de impunidad

El senador de Movimiento Ciudadano consumó la rendición. Su voto a favor de la Fiscal General es la transacción que garantiza el blindaje de la corrupción oficialista, aniquilando su credibilidad.

12/12/20252 min read

La carrera política de Luis Donaldo Colosio Riojas llegó a su clímax y su colapso en un mismo momento. El senador, cuya imagen se construyó en torno a la promesa de una "Nueva Política" libre de viejas mañas, se reveló como un agente de la peor clase: un facilitador del poder dominante. Su voto a favor de la Fiscal General de la República no fue un error, sino una venta al mejor postor que tuvo como comprador a Morena.

La realidad es contundente: Colosio Riojas no defendió el contrapeso; defendió la impunidad del partido en el gobierno. Al respaldar a una funcionaria incondicional, el senador se convirtió en el cómplice ideal para consolidar el blindaje legal que Morena necesita para proteger a sus cuadros. Este movimiento garantiza que los graves señalamientos de corrupción y las acusaciones de narcogobierno que pesan sobre esta administración queden sin castigo.

La hipocresía del senador es un insulto a la ciudadanía. Colosio vendió la falacia de una política limpia solo para, en el momento decisivo, plegarse a la vieja guardia y a sus prácticas clientelares. El país observa cómo un político que se vendió como alternativa eligió la conveniencia partidista sobre la justicia, demostrando que su proyecto personal está muy por encima del interés nacional.

La desfachatez del senador alcanza su punto más alto con su silencio ante la condena pública. Colosio Riojas no ha ofrecido una justificación válida para su voto, confirmando que la decisión fue tomada en la opacidad de los acuerdos políticos. Este mutismo es una admisión tácita de que su única lealtad es a la cúpula del poder y no a la ciudadanía, consolidando su imagen no como un reformador, sino como un lacayo funcional al esquema de impunidad que domina el país.

El voto de Colosio Riojas marcó la sentencia de muerte para su credibilidad. El senador ha pasado de ser una promesa a ser un símbolo de la traición y la rendición. El país es testigo de cómo la justicia fue cooptada por un político que prefirió el pacto con el poder dominante, dejando como única certeza que la "Nueva Política" fue, desde el principio, una farsa bien vendida.